**José Félix Díaz**
*Actualizado 09/04/2025 – 11:00 CEST*

No es momento de pelearse, sino de abrir la puerta al cambio y seguir representando al Real Madrid con dignidad. Así lo piensan los dirigentes tras el duro golpe en el Emirates. Se está analizando la complicada temporada, pero el diagnóstico final llegará más adelante. No se trata de ignorar la situación, sino de mirar hacia el futuro sin rendirse, ya que aún hay títulos en juego, empezando por la Champions.

Los directivos son conscientes de los problemas. El equipo que brilló la temporada pasada ya no es el mismo. El Arsenal ha tomado ventaja en la eliminatoria, y el Madrid necesita un milagro en el Bernabéu.

Un dato que ha llamado la atención es que los jugadores de Ancelotti corrieron diez kilómetros menos que los de Arteta, y veinte menos que en el duelo entre Bayern e Inter. Esta falta de esfuerzo se ha repetido en Europa, salvo en el partido contra el City.

Los buenos resultados anteriores habían ocultado la falta de compromiso de algunos futbolistas, un tema que se ha discutido en las reuniones, pero que no se abordó hasta ahora. El método Pintus no ha dado resultados en esta fase decisiva, y la dejadez de varios jugadores es evidente.

Con tres meses de competición por delante, lo que suceda el miércoles en el Bernabéu, más allá del resultado, será clave para muchas decisiones. En Valdebebas se ha hablado de la necesidad de cambios importantes, y ahora se reafirma esa idea.

Los dirigentes quieren transmitir que el escudo del Madrid no permite rendirse ante la adversidad. Se lo harán saber a los jugadores, pensando en la vuelta y en una posible remontada. Quieren que dejen de lado los egos y que el Madrid vuelva a ser un equipo, una misión que recae en Ancelotti. 

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