**JUAN IGNACIO GARCÍA-OCHOA**
Actualizado 16/04/2025 – 22:57 CEST

La remontada del Madrid se quedó en un par de vídeos en redes sociales y un mosaico bajo la lluvia. La afición cumplió, pero el equipo no. Las noches de locura siempre llegaron con un gran equipo detrás, algo que este Madrid no tiene esta temporada. Era demasiado optimista pensar que el plan de juego aparecería por arte de magia en un partido decisivo, especialmente contra un Arsenal bien trabajado por Mikel Arteta. El resultado global fue 1-5, y el Real Madrid queda eliminado de la Champions League.

¿Está Ancelotti tocado tras esta eliminación? Sin duda, aunque no es definitivo. La próxima semana hay una final de Copa que podría aclarar su futuro, especialmente porque ha perdido muchos puntos ante la afición, que se marchó decepcionada. No es el momento de criticar a los jugadores por su actitud; dieron todo, pero faltó un plan de juego.

El Bernabéu demostró su grandeza al recibir al equipo con emoción, a pesar de que el Madrid no ofreció muchas señales de vida. Courtois, el portero belga, fue clave al detener un penalti a Saka en el minuto 13, manteniendo al Madrid en el partido. Sin embargo, el equipo no supo qué hacer con el balón en los saques de banda, y ante un Arsenal tan bien organizado, la improvisación del Madrid fue evidente. Un dato alarmante: no remataron a puerta en toda la primera parte, lo que hizo imposible marcar los tres goles necesarios.

El árbitro Letexier no estuvo a la altura, fallando en varias decisiones y gestionando mal las pérdidas de tiempo del Arsenal. Su arbitraje fue frustrante, y el VAR no ayudó en momentos clave. Además, Mbappé se marchó lesionado a 15 minutos del final, sumando más problemas al equipo. 

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